¿Convence a los vigueses las fiestas sin atracciones?
Consideran que son imprescindibles junto con la música y la comida pero valoran que haya mayor control de seguridad
Vigo vive un verano atípico con fiestas sin atracciones. El accidente mortal del año pasado en el Saltamontes de Matamá ha provocado que se extreme la precaución y la seguridad, exigiendo el cumplimiento riguroso de la normativa para evitar otro suceso. Vigueses echan en falta las atracciones pero entienden los motivos.
Las primeras en verse afectadas fueron las fiestas de Coia, que estuvieron a punto de cancelarse pero se salvaron ‘in extremis’ con una edición descafeinada que convenció a vecinos como Ángeles. “Me gustó cómo fue este año. Me encantó porque veo que es la fiesta de toda la vida. Había espacio para todo. Antes con tanta atracción parecía un parque de atracciones”, señala.
Ahora el protagonismo es para Bouzas, una de las fiestas favoritas de los vigueses. La mayoría consideran imprescindible que en los festejos haya música, puestos de comida y atracciones, aunque el accidente del verano pasado ha provocado que algunos desconfíen.
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